Hoy hemos tenido la última de las excursiones de Cuaderno de Bitácora de este primer curso. Para mí a sido un día muy especial por varios motivos: ha sido con mis niños y niñas del comedor (CEIP Víctor Pradera) y hemos terminado como empezamos, con un Jaume el Barbut.
Nos temíamos calor y aseos cerrados por obras, pero el día se ha portado bien con nosotros, y mejor aún los obreros. Los chavales, increíbles como siempre, han disfrutado de la actividad, han aprendido y, por supuesto, han encontrado el tesoro del conde de valor.
Termina aquí una etapa piloto de excursiones para Cuaderno de Bitácora con resultados muy positivos, mucho feedback por parte de los profesores y alumnos, y también alguna cosita que mejora. Además, he podido trabajar con un equipazo de lujo (Sensi, Pedro, Aida, Álvaro, Lorena, Laura, Guillem y Antonio), y no hay nada como ponerte a disfrutar (trabajar) y saber que tienes gente detrás que te apoya.
Ahora a descansar hasta finales de agosto, que habrá que ponerse a crear nuevas excursiones (sobre todo para el Ramón Llull que siempre las coge todas y nos obliga a renovarnos).