La entrada de hoy será un poco más personal de lo acostumbrado: ¿será la hora?, ¿el cansancio?, ¿me vuelvo melancólico con la edad?.
En el comedor la biblioteca al aire libre sigue funcionando a todo ritmo, con más de 100 préstamos diarios. Y como tenía la garganta tocada, mi jefe me ha exprimido un zumo de naranja con una cucharada de miel. Tengo uno de los mejores jefes del mundo, no puedo decir otra cosa. Sigue leyendo